En este complejo nace el río Bogotá, aunque estudios sobre flora y fauna aún son escasos.
Una decena de personas recorrieron el páramo de Guacheneque, con cámaras en mano, para comenzar a identificar la flora y fauna que se encuentra en el complejo, en donde nace el río Bogotá, y que está ubicado en el municipio de Villapinzón (Cundinamarca).
Estas acciones hacen parte del proyecto denominado Conexión Bio, financiado con recursos del Sistema General de Regalías, que arrancó en el 2013 para que los bogotanos se apropien de la biodiversidad.
El proyecto está en manos de la Secretaría de Ambiente, del Jardín Botánico y del Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander von Humboldt. Cuenta con $ 14.650 millones, de los cuales se han ejecutado 12.554.720.017 al 31 de diciembre de 2018
Se implementó en ocho puntos o nodos claves, y en cada uno de ellos hay estrategias y énfasis bien sea para la educación, la conservación, la rehabilitación de ecosistemas, entre otros.
En el caso del páramo de Guacheneque, que es un nodo de conservación, le proyecto busca recopilar la información, que aún es precaria, sobre la riqueza de este espacio en materia de flora y fauna, pues como aseguró la bióloga del Jardín Botánico de Bogotá, Marcela Cáceres, “no podemos conservar algo que no conocemos”, reseño.
Hoy el páramo cuenta con 8.900 hectáreas y allí nacen los ríos Paila, Funza o Bogotá, Muincha, Panacha, entre otros afluentes, recordó Vidal González, cuidador desde hace décadas de este páramo. Aseguró que el ecosistema surte de agua a 17 acueductos veredales y a cuatro municipales.
En el páramo de Guacheneque se analiza la información, mientras se realiza un bioblitz. Este es un evento de educación y ciencia ciudadana, en el que son los mismos participantes, a través de jornadas de visita en el páramo, quienes registran la flora y fauna del ecosistema.
Estas imágenes luego son cargadas a la aplicación Naturalista Colombia, que a su vez está conectado a un centenar de expertos científicos en el mundo, con quienes se podrá compartir esta información. A esto se le llama monitoreo participativo. Cada participante debía subir tres imágenes, y en la medida en que la imagen comienza a ganar comentarios de expertos, esta va aumentando su categoría. Las más comentadas terminan siendo analizadas por conocedores internacionales.
Lo que buscamos es recopilar la información, crear una guía didáctica, e incentivar a conocer el páramo para conservarlo, dado que aquí hay muchas personas que vienen a visitarlo y a hacer turismo.
Pero el proyecto también busca mejorar la señalización al interior del sendero del páramo, con el fin de reemplazar la existente, que se encuentra deteriorada o en mal estado.
Publicado en: El Tiempo